Cada mañana en el hospital, cuando sentía la bata rozar mi piel y esas medias abrazar mis piernas, algo dentro de mí despertaba. Me miraba de reojo en el reflejo de la ventana, con la luz entrando suave… y me descubrí deseando que alguien me viera así. Delicada pero poderosa. Vulnerable pero sexy. Estas medias vivieron conmigo momentos de silencio, suspiros en la madrugada, y sueños húmedos entre goteros y luces blancas. Ahora pueden ser tuyas. ¿Quieres sentir lo que yo sentí? ---
Detalles del producto:
Medias blancas quirúrgicas, originales de hospital.
Hueco en la planta que deja respirar y fantasear.
Usadas 8 días seguidos bajo órdenes médicas.
Cargadas de vivencias íntimas, vulnerabilidad y placer escondido.
Envío con aroma especial y nota escrita a mano sobre la experiencia.