No quiero revelar mi nombre aquí por motivos personales. Entenderás por qué si sigues leyendo. Todo lo que puedo decir es que procedo de la nobleza escocesa, pero tuve que exiliarme hace unos años debido a una disputa familiar que dura ya 200 años. Crecí en las vastas tierras salvajes de las Highlands escocesas, en nuestra finca familiar, un hermoso castillo que cayó en manos de los MacLeod hace unas décadas. Dos años después de que nuestro enemigo nos invadiera, conseguí escapar de los MacLeod, y desde entonces he vivido en el exilio. Pero algo ocurrió durante esos dos años, dos años en las garras del clan MacLeod, dos años que me cambiaron para siempre. ¿Quién iba a pensar que mi miedo inicial podría convertirse en un éxtasis abrasador? Noche tras noche, la lujuria y la pasión fluían a través de mí, como un río de resplandeciente lava fundida que se desbordaba de mis entrañas. Aún puedo sentir las grandes manos masculinas del jefe del clan sobre mi suave y cálida piel femenina. Tal vez te gustaría experimentar conmigo el calor de aquellas noches, sentir el aroma de mi pasión y comprender lo que viví aquellos años, ¿verdad? Entonces estaré encantada de enviarte algo que te permita compartir mi pasión. ¿Cómo soy? Tengo el pelo largo y suelto de color rubio oscuro, ojos azules y una boca y unos labios que llamarías sensuales. Tengo 55 años y paso mi tiempo libre practicando pilates, montando a caballo, algo obligatorio para una verdadera escocesa, y jugando al ajedrez para desafiar mi intelecto. Mis dos fieles perros me acompañan en la caza. Vivo sola, pero mi jardinero Vincent viene tres veces por semana para ocuparse de la jardinería y, de vez en cuando, echar una mano en casa, ya me entiendes. Y una última cosa. Por supuesto, ¡me encanta el champán!