Me gusta especialmente llevar este pequeño tanga de leo. Tan sexy, elegante y a la vez perverso. El aspecto Leo me hace sentir como un gran felino que delimita su territorio con sus olores y fluidos corporales. Con mi pasión y tu imaginación, podemos recorrer juntos mi territorio íntimo. ¿Cómo vas a disfrutar de mí ahora? ¡Averigüémoslo! Para sabores más intensos, déjame vagar más tiempo como una gran gata y quizá también ser traviesa.